Parque Nacional marítimo-terrestre de las islas Atlánticas de Galicia. Archipiélagos de Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada.
Introducción a los acantilados litorales del Parque Nacional (I)
Las islas presentan dos caras o vertientes bien diferenciadas, occidental y oriental u oeste y este, la primera mucho más abrupta, con acantilados muy verticales, y la segunda más suave y «amable», con arenales y sistemas dunares.
Es un paisaje de contrastes modelado por la acción de los agentes erosivos.
Son islas de formas alargadas (Cíes y Ons) que están muy caracterizadas por esa morfología opuesta entre las caras oeste y este. El oleaje del mar a lo largo del tiempo fue erosionando la costa, generando grietas, socavando y provocando la caída de bloques, formándose de este modo los acantilados verticales que observamos en la actualidad.
El viento y la salinidad también contribuyen a modelar de forma importante el paisaje de ambas caras o vertientes.
Por tanto, son zonas con una gran influencia del mar, golpeo de las olas, viento y alta salinidad que contribuyen a modelar de forma importante el paisaje de ambas caras o vertientes. Por tanto son suelos con condicionantes muy adversos para el desarrollo de las plantas, donde solo la vegetación especializada es capaz de instalarse. Así, ésta adopta forma almohadillada para ofrecer menor resistencia. Las colonias de gaviotas influyen en estas comunidades vegetales enriqueciendo los suelos con sustancias fertilizantes a partir de sus excrementos.
Dependiendo de la proximidad del mar distinguimos varias franjas de vegetación. En las zonas más bajas y próximas al mar, muy influenciadas por las salpicaduras del mar, se encuentran el perejil de mar, la armeria, helecho marino, ortiga o manzanilla marina.
En la siguiente franja, por encima de la anterior, aparecen pastos donde llegan salpicaduras pulverizadas de las olas provocando alta salinidad. Aquí surgen armeria, silente marina, dáctilos marinos, heno blanco, angélica, caléndula marina o parietaria.
En la parte superior del acantilado tenemos las zonas menos influenciadas por las salpicaduras marinas, apareciendo el matorral costero de acantilado con tojo, silene marina, brizo, margarita mayor de acantilado, dáctilo marino, jaguarzo negro, torvisco o retamas como la citysus insularis, único endemismo do Parque, presente en Ons y Sálvora.
Continuará…
Imagen destacada:
Pedro Figueras
Imágenes galería:
Santiago Boado Aguinaga y Pedro Figueras